El 6 de julio de 2016 el Congreso de la República expidió la Ley 1787, cuyo objeto es crear un marco regulatorio que permita el acceso seguro e informado al uso médico y científico del cannabis y sus derivados en el territorio nacional colombiano. Con esto se dio apertura a una nueva industria que para desarrollarse a nivel competitivo internacional requiere del conocimiento necesario para desarrollar un cultivo con los estándares de calidad requeridos, un camino que para las empresas ha sido de muchos aprendizajes.

Diego Florez, Ingeniero Agrónomo jefe de proyectos en cultivo de Anutea nos comparte su experiencia sobre el cultivo de cannabis medicinal en el trópico colombiano.  

¿Diego que te motivo a incursionar el mundo del cultivo de Cannabis medicinal?

“David quería cambiar ese modelo de cultivo tradicional de flores que es un modelo de muchas horas de trabajo y pocas horas de familia. El cannabis me abrió la oportunidad de tener tiempo con mi familia. Además, es un cultivo atípico, muy diferente a los cultivos tradicionales y en el comienzo es un mundo lleno de paradigmas y mitos que te motiva a investigar y aprender.”

¿Como has navegado ese mar de mitos y paradigmas acerca del cultivo?

“Sembrando, no se niegan las posibilidades ni nos cerramos a nuevas ideas. Para demostrar que métodos funcionan se han llevado a la práctica. Una vez se obtienen resultados en laboratorio sacamos conclusiones. Una de las cosas que más se ha logrado en Anutea es desmitificar el cannabis desde la siembra hasta la cosecha y todo ha sido un proceso de búsqueda de la verdad. El reto de desmitificar es pasar de un cultivo endiosado a un cultivo industrial, que sea estandarizado y con resultados positivos.”

¿Has tenido la oportunidad a través de los años de recibir cultivadores de otras partes del mundo a visitar tu cultivo, como ha sido la recepción y tu experiencia?

“Ha sido muy buena experiencia, vienen personas que saben mucho del tema y están centrados en sus objetivos. Otros llegan a criticar, pero lo importante es tomar la información que consideras es útil.  Me han visitado de España, California, Canadá, México entre otros. Todos llegan de un mundo diferente, por lo general modelo indoor del hemisferio norte. De esos modelos indoor se han aplicado conocimientos de muchos años de experiencia, pero también se ha aprendido a adaptar estos modelos a Colombia.”

¿Consideras el cultivo de cannabis medicinal como afición o negocio?

“Son las dos, es una afición que debe generar valor, es un gusto y es pasión al mismo tiempo. Es negocio porque trabajas con muchos factores como productividad, luces, podas, cosecha y debe ser rentable al final. Este mundo te lleva a explorar cosas nuevas cada día, por ejemplo, cuando pasas de cultivo a procesos de extracción de aceites en laboratorio se te abre un mundo completo.”

Hay incontables genéticas para sembrar ¿Qué factores influyen en la selección de una genética a otra?

“Para escoger una genética se analiza productividad por metro cuadrado, resistencia a plagas, enfermedades, expresión fenotípica, vigorosidad y contenido de cannabinoides. Es un trabajo de un año para poder decir que una genética cumple con las características correctas. El proceso se debe repetir numerosas veces al año para poder estabilizar la genética y proyectar resultados en el futuro.”

¿Cuál etapa en el cultivo presenta el riesgo mas alto?

“Floración es la etapa más difícil, el reto se encuentra en la propagación de enfermedades y hongos como el Botrytis, porque en una semana puedes perder todo el cultivo que te llevo semanas completas de trabajo.”

¿Qué información o análisis utilizas para concluir si los resultados de campo son positivos?

“A través de una cromatografía analítica se cuantifican e identifican compuestos químicos o biológicos en la planta que son importantes porque entiendes que estas cultivando. Sabes el retorno, la calidad y si es segura para consumo humano. Entre más concentración de cannabinoides se paga mejor el gramo de flor. La cromatografía analítica determina si hay presentes pesticidas, metales pesados o aflatoxinas que son nocivas para la salud.”

¿Qué le quieres compartir a las personas que están entrando a este mundo como afición o negocio?

“Humildad para entender que hay personas que te pueden aportar y te van a decir que algo está malo en tu proceso y es importante aceptar los errores y corregir. No tragar entero y llevar las ideas a campo. Acá en Anutea empezamos con muchas opiniones traídas a la industria por la experiencia de cada cultivador. A todos se escucha y de todos se saca lo que uno considera que es lo mejor.”

Foto por: Micael Guarín Alvarez